Valor añadido

Hoy tengo ante mis ojos una escalera de caracol.
Ayer fue un balcón y mañana quien sabe.
Quizás unas tijeras de las que se usan para cortar patrones de ropa.

Todos vienen a verme pero siempre faltas tú.
De nada sirven los preparativos.

¿Cuándo vendrás a llevarme muerte esquiva?
Valor no tengo para ir donde habitas entre brumas.
¿Me tienes reservado para cuando el aburrimiento te canse de acabar con inocentes?

El sonido del mar

Del sonido del mar me gusta la caracola que lo envuelve.
Si me besas te regalo un océano y me perderé en ella.

No molestaré más te lo aseguro.
Sólo es un beso que me llevo.
Dormiré abrazado a él todo el invierno.
No se lo que es pasar el letargo de las nieves sin el calor de un beso.
Y es tan largo el olvido...